El suelo

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En Finca El Refugio cultivamos con cariño y  esmero nuestros viñedos para conseguir uvas sanas que concentren aromas, color y estructura.

La altitud a la que se sitúan los viñedos, el clima extremo con inviernos fríos y veranos cálidos, la escasez de lluvias y los suelos calizos, son factores esenciales para que las viñas desarrollen todo su potencial obteniendo bajas producciones de excelente calidad y vinos de gran expresión.

El alma de nuestros vinos

Los viñedos de la Finca El Refugio ocupan una extensión de 50 has., todas de la propiedad situada en un radio de medio kilómetro de la bodega y los centros de recepción. Únicamente así podemos garantizar el seguimiento de todos los procesos vitícolas y así conseguir uvas sanas que concentren aromas, color y estructura. Todos los viñedos están dotados de riego por goteo y control de humedad para un suministro de agua acorde con la necesidad de cada variedad y parcela.

La preparación de nuestros terrenos ha sido esmerada: eliminamos las posibles piedras que dificulten las labores y mantenemos el viñedo limpio de malas hierbas, optimizando las características excepcionales de nuestros suelos.

Nuestra filosofía de trabajo se basa en la satisfacción por las cosas bien hechas y unimos la forma tradicional de elaboración de España y Europa con las más modernas tecnologías para la elaboración de los vinos y la introducción de nuevas variedades con el firme propósito de generar vinos modernos conservando toda su esencia.

Las idóneas condiciones climáticas de largos inviernos duros y cálidos veranos, combinados con un suelo arcilloso-calcáreo de escasa profundidad, nos proporcionan una uva capaz de producir vinos extraordinariamente concentrados y aromáticos.